El storytelling para psicólogos (contar historias) es una forma muy positiva para comunicar mensajes inspiradores y transmitir valores.
Es la misma técnica que utilizaban cuando éramos pequeños y nos contaban cuentos para mostrarnos valores y que aprendiéramos de forma divertida.
¿Por qué es tan potente?
- Porque contando historias hacemos que el oyente se “sincronice” con nosotros. El oyente “se introduce en la historia” de forma que la transforma en su realidad y piensa y avanza con la persona que lo cuenta. Un efecto de las llamadas “neuronas espejo”
- Las historias dan credibilidad y ayudan a visualizar el contexto, los cambios y el resultado.
- Crean un efecto más empático. No nos centramos tanto en los hechos como en las sensaciones.
- Facilita la memorización. Es más fácil recordar una anécdota que una lista de hechos.
- Ayuda a mantener el foco y la atención. Cuando estamos en el hilo de una historia tendemos a seguirlo para saber “el final”
- Facilita la comprensión de las ideas.
Así que por todo ello, hoy te voy a dar las claves para que utilices el recurso del storytelling para psicólogos en tu negocio.
Tabla de contenidos de este post
¿Por qué es importante contar tu historia?
Verás, por una parte, contar tu historia:
- Te ayuda a revisar tu misión, tus valores, y ver si están alineados con el tipo de negocio que estás montando, el método que creas y el cliente al que te diriges.
- Te aleja de la sensación de “negocio” y te acerca a la sensación de “misión”.
- No está demás que revises todo lo que has aprendido. A veces echas la vista adelante y vemos todo lo que nos falta pero nos cuesta ver todo lo que hemos avanzado.
- Y además, a tu cliente:
- Le ayuda a conectar contigo como persona (y eso es un 85% de la decisión de trabajar contigo)
- Le permite ver si eres la persona con que quiere trabajar
Si tu historia es coherente con el servicio que das serás más creíble sin necesidad de refugiarte en ningún título y demostrarás una transparencia absoluta que creará un efecto inmediato: confianza.
Además, si tratas de responder a las preguntas que buscan tus clientes al leer tu historia, mejor que mejor. Para que te hagas una idea, estas pueden ser:
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Las preguntas informativas:
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- ¿A qué se dedica exactamente?
- ¿Sabe de lo que habla?
- ¿Cuánta experiencia tiene?
- ¿Qué referencias tiene?
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Las preguntas emocionales:
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- ¿Cómo es su personalidad?
- ¿Cómo enfrenta los problemas?
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Las preguntas internas:
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- ¿Entenderá lo que siento y será comprensivo conmigo?
- ¿Cómo me trataría a mí si yo fuera su cliente?
- ¿Podría aportarme soluciones a los problemas que tengo yo ahora?
- ¿Podré yo enfrentar los problemas como el/ella lo hizo?
Como ves hay más preguntas irracionales que racionales.
Pues bien, esas son las que tendremos que responder en nuestra biografía (la página de acerca de), en entrevistas, en artículos de invitado o en una conferencia (fíjate que en casi todas las charlas Ted cuentan un mensaje a través de su historia o de las de otros.)
Estrategias de comunicación persuasiva para hacer storytelling para psicólogos
Cuando comiences a redactar tu historia, apóyate en estrategias de comunicación persuasiva, como por ejemplo:
1 – Hablar claro. Esto implica:
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- Un lenguaje directo (que no agresivo).
- Frases cortas.
- Palabras simples.
- No dar muchas ideas diferentes.
Ojo aquí con comunicar de manera “más espiritual de lo debido”. Recuerda en qué etapa está tu cliente.
2 – Utiliza la primera persona. Las biografías en tercera persona alejan más al lector. Tu objetivo es simular que se lo estás contando tú así que mientras puedas, escribe en primera persona.
3 – Utiliza la segunda persona (tú) para hablar al lector. Estamos emulando una conversación, y la gente no te lee en grupo detrás de la pantalla. Así que eso de “vosotros”… No.
4 – Habla de cómo te sentías y de cómo se puede sentir tu cliente. Tu cliente ahora mismo tendrá un caos de argumentos y valoraciones en su cabeza que le confunden. Lo que necesita es que alguien ponga palabras a lo que está sintiendo. Se creativo y específico:
- Usa palabras que impliquen estado emocional: “confusión, pereza, desánimo, o entusiasmo, curiosidad, deseo,…”
- Usa verbos que demuestren cambio y acción: “conseguir, superar, alcanzar…» Todos transmiten cosas distintas. ¿Cuál usaría tu cliente?
5 – Utiliza las mismas palabras que utilizaría tu cliente o usabas tú en el pasado. Son las que más le van a llegar y va a sentir que le “lees la mente”.
6 – Evita hablar de cambios mágicos, tópicos y promesas vacías. Tu cliente no espera que le solucionen la vida de la noche a la mañana. De hecho ahora mismo ni siquiera cree que haya solución. Probablemente le parezca más creíble decirle que con paciencia, trabajo y cariño todo se arregla.
7 – Cuando quieras darte autoridad nombra tus formaciones, títulos, etc., pero no les des el peso máximo, simplemente enuméralos. Habla de que has encontrado un método/un proceso/unas herramientas, que surge a partir de todo eso.
8 – Habla de tu método o de tu concepto principal. Esto apela a la curiosidad y muestra algo “diferente” que nunca habían oído.
9 – Evita juzgar: por ejemplo a tu competencia o a los que no lo hacen como tú.
10 – Déjales claro que para ti es tu misión vital ayudarles, porque les entiendes y sabes que necesitan ayuda.
11 – Y por último, envía un mensaje positivo: el cambio es posible y tú eres la persona para ayudarles.
¡Ahora te toca a ti! Repasa el camino que te ha traído hasta aquí, el por qué de la persona que eres ahora, y aplica las estrategias de storytelling para psicólogos.
¿Reconoces esas experiencias que te han marcado y que te han convertido en la persona que eres ahora? ¿Tienes anécdotas que te ayuden a explicar conceptos difíciles? Te leo 🙂
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