La semana pasada quedé con una de mis mejores amigas que lleva un año viviendo en Holanda. Teníamos sólo una tarde para ponernos al día, así que desde que nos encontramos no paramos de hablar.
A medida que avanzaba la conversación nos dimos cuenta de dos cosas:
- Es increíble lo rápido que pasa el tiempo. ¡Sí parece que fuera ayer cuando trabajaba en Sevilla!
- Es aún más increíble lo que da de sí un solo año. Si sólo miras adelante parece que quedan muchas cosas por hacer, pero es también muy bueno mirar atrás y ver lo que has avanzado.
He pensado que agrupar estas reflexiones en un post, sobre todo lo que he aprendido en 2014, te pueden inspirar para empezar el 2015 con buen pie, así que ahí van:
Tabla de contenidos de este post
1. ¡Cometer errores es maravilloso!
Vale, no te digo que sea divertido, pero te aseguro que cometer errores no es malo.
Vivimos en una cultura en la que se desprecian los errores del pasado y llevan como una terrible carga en la vida, pero al final los errores son solo otra forma de aprender.
En Estados Unidos son menos reacios a darte préstamos si ya llevas alguna empresa cerrada detrás. Saben que eso significa que cuando caes te vuelves a levantar y que eres «de los que ya tienen todo aprendido».
2. Ejercita tu mente y podrás hacer todo lo que te propongas
Una de las cosas que más me impacto este verano en mi viaje en Birmania, es como un pueblo que estaba bajo una terrible dictadura, en la que apenas comían arroz con verduras y que solo tenían electricidad en algunos sitios, pudieran ser siempre tan amables y parecer tan felices.
En Birmania la mayoría de la población practica la meditación en su día a día. No lo hacen como un ejercicio de relajación sino como un entrenamiento mental, en el que aprenden a controlar todos esos hilos mentales negativos que rondan nuestra cabeza (preocupaciones, autoreproches, victimismos, enfados…) y ver qué es lo que realmente tenemos ante nuestros ojos.
3. Muévete según tu plan, no según el de otros
Todos tenemos una idea en nuestra cabeza de como sería nuestra vida ideal. Pero a veces no trabajamos para acercarnos con razonamientos como
Como dice Laura Ribas, todos somos directores de al menos una empresa: nuestra vida. De nada sirve escudarse en esos argumentos para negar esa responsabilidad.
Eso sí, para llevar las riendas de esa «empresa», vas a tener que dejárselo claro a los demás. Incluido a esas personas que siempre han estado a tu lado y solo quieren «lo mejor para ti». Ser la persona que los demás esperan que seas, en vez de la que a ti te gustaría ser, te va a costar el levantarte por las mañanas sin ninguna motivación.
Se puede medir el éxito de una persona según la cantidad de conversaciones incomodas que sea capaz de mantener durante el día.
4. Invierte en las personas de tu alrededor
Como dice el refrán «Se siembra lo que se cosecha». Vamos, que si haces las cosas bien con la gente de tu alrededor (tus amigos, tus clientes, tu familia, tus compañeros de trabajo…) al final eso te vendrá de vuelta en el futuro.
Pero si les dedicas un poco de tu tiempo y estás disponible cuando necesitan tu apoyo te estarán tremendamente agradecidos y te volverá en forma de algo bueno en el futuro.
5. El dinero no es lo importante
Seguro que si te pregunto si te gustaría ganar 10 veces más dinero que ahora mismo me responderías que sí. Pero si te digo que para eso tendrás que dejar de ver a tu familia o trabajar 14 horas al día…
Uno de mis libros favoritos es la La semana laboral de 4 horas, donde Tim Ferris cuenta su historia sobre como pasó de tener una vida sin desconexión del trabajo y ganando miles de euros, a una vida más tranquila y con mucha más libertad.
Tim comenta en su libro lo absurdo de que nos hayamos acostumbrado a pasar nuestros mejores años trabajando «para tener un futuro mejor» . Al final, esperamos a la jubilación para ponernos a viajar y a disfrutar cuando es el momento en que ya no tenemos capacidad para hacer tantas cosas.
La historia de ese chico es muy inspiradora así que si la queréis leer aquí os la dejo: La semana laboral de 4 horas.
6. Escucha a tu cuerpo
Desde pequeño nos han insistido en que nos comportemos «de manera racional», y que hagamos las cosas con «lógica». Parece razonable, ¿no?
Pero cuando tienes un trabajo de éxito con un sueldo estupendo y sientes que te aprieta algo en el estómago cada vez que tienes que iniciar un nuevo proyecto, algo no va bien. Quizás, también tienes una sensación momentánea de liberación cuando hablan de que van recortar puestos y te imaginas que podrías ser tú.
Si los ignoras te acabaran pasando factura en forma de estrés, ansiedad o simplemente desmotivación. Y te perderás también sensaciones fantásticas de inspiración y liberación.
7. Sigue aprendiendo. Sigue enseñando.
Si tuviera que decir cuál es mi hobby oficial, ese es aprender. Si me levantara un día de la cama y hubiera perdido esa curiosidad por cómo funcionan las cosas y como puedo mejorarlas perdería gran parte de mi energía.
Aprende todo lo que puedas y también enseña. Porque enseñar es también aprender: a comunicar mejor, a conceptualizar, a ordenar tus ideas… Además de ser muy gratificante.
Iuiu dice
Un post muy interesante y con muy buenos consejos. Ojalá muchos que te lean los apliquen 😉
Ana Sastre dice
Me alegro que te guste Iuiu 🙂 Feliz año y a empezar con fuerza!
Itziar dice
Ana,enhorabuena por este post resumen.Muy buenas reflexiones!!me apunto alguna de ellas
Ana Sastre dice
Gracias Itziar, en 2015 haremos repaso de como nos ha ido 🙂
Luis B. dice
Casi feliz año nuevo Ana!
🙂
Ana Sastre dice
Igualmente Luis !! Ya queda poco!
Julian Sastre dice
Hola Ana, excelente articulo, te pongo mis comentarios por si son de utilidad para la «Comunidad»:
Respecto al punto 1: Estos tres últimos años he cometido mucho errores pero uno gordo y lo he resuelto. Con ayuda de jóvenes millennials profesionales como tu. No veas lo que que he aprendido y con mas de medio siglo de vida. Y ahora estoy muy contento por ello. Y estoy sobreviviendo y creciendo.
Punto 2: Eso lo hago diferente, cuando voy a correr, busco » a mis musas», cada uno tiene su modo, pero el concepto que cuentas lo comparto.
Punto 3:Así lo he intentado y cuando no he podido, siempre he tenido en mente que algún día seria distinto y que quería otra cosa. Eso no significa «arrasar con todo», pero hacer bien las cosas al final te ayuda y te lo reconocen, todos mis «Ex» profesionales son buenos clientes.
Punto 4:Lo más, es mi máxima. Prefiero hacer un 130% mas para estar seguro de que tengo razón, que he hecho lo correcto. Y todavía pago todos mis impuestos en España aunque tenga empresas en el mundo. Es mi entorno. Y viva el networking.
Punto 5: efectivamente el dinero no es lo importante, aunque hay que hacerse valer, lección que tengo pendiente y estoy en ello.
Punto 6: Llevo corriendo 45 años, nunca llevo pulsómetro ni otras cosas que me recomiendan, ni reloj. Mi cuerpo me dice mucho. Le escucho.
Punto 7: Formación permanente, me hice Doctor en la madurez y aprendo cada día, eso enriquece.
Así que de acuerdo en todo y gracias por escribirlo tan bien y que bien que lo sientas, enhorabuena.
Ana Sastre dice
Que buen repaso has hecho 🙂 Si la verdad es que el deporte ayuda mucho, yo utilizo el Contact Improvisation para desconectar de tanto estimulo exterior y conectar mas conmigo misma.
Y efectivamente seguiremos aprendiendo cada dia ( y cometeremos errores que nos serviran para aprender mas) . Eso es la experiencia 🙂 Feliz año!
clara dice
Ana,tienes una visión de la vida muy real,me ha encantado el post,eres muy clara y comparto muchas de las ideas que comentas,el buen hacer, la constancia, el esfuerzo, el rodearse de gente sana y el disfrutar de cada momento del día es la base para el crecimiento personal y profesional, se puede, si se puede!, no hay excusas, enhorabuena por el post y feliz año!
Ana Sastre dice
Gracias Clara! Al final solo tenemos una vida y tenemos que aprovecharla para ser felices y compartir con quien nos hacen bien. Me alegra que compartamos la misma vision 🙂 Un abrazo y feliz año!
Javier Cordero dice
Hola, Ana.
Excelentes tus reflexiones.
La que más me ha gustado es la de escuchar a tu cuerpo.
Estoy al 100% de acuerdo en que a veces el mismo cuerpo es el que pide el cambio o te indica que algo no va bien.
De hecho hoy tengo gripe 🙁 y sabes, creo que en el fondo no es por la baja temperatura sino porque estaba agotado de todo el año y mis defensas lo han notado, por lo que me he decidido a descansar, leer y nada de ordenador. Bueno, solo este comentario. 😉
Mi mente pide un poco de desconexión.
Gracias por la mención y estoy seguro que este año te irá aún mejor.
Un abrazo!
Ana Sastre dice
Hola Javier , que alegria verte por aqui! Pues si, las defensas aguantan lo que aguantan y luego hay que dejaralas descansar 🙂 yo me he dado cuenta que mi punto debil es el estomago asi que intento cuidarme el comer bien para no forzarlo.
Pues nada ahora tomate tu descanso que ademas de llevar tu blog de estrategias de Marketing currar como experto en una gran empresa… ya tiene merito!!! Un abrazo y hablamos pronto!
Laura Ruiz dice
Hola Ana!
Me ha encantado el artículo, y además lo he saboreado como se hacen las lecturas interesantes, sentada tranquila con un buen café 🙂
Es un placer compartir formación, energía e ideas con vosotros, no hay nada más enriquecedor que encajar en un grupo con inquietudes parecidas ¡y es que mi vicio también es aprender!
Un abrazo fuerte!
Ana Sastre dice
Gracias Laura!! La verdad es que ha sido un placer conocerte, espero que nos veamos la proxima vez que pase por cordoba, o aqui mismo en sevilla. Seguro que tenemos muchas cosas nuevas que contar!! Un abrazo
Joaquín dice
Hola Ana.
Muy chulo el post… Son bueno puntos a tener en cuenta… Para mí los que mejor llevo son el 6 y el 7… Mi cuerpo me ha salvado la vida en más de una ocasión, gracias a haberlo escuchado con atención y a haberle hecho caso. por otro lado aprender y enseñar, es mi motor, es lo que más me divierte…
Mi punto débil, invertir en la gente de mi alrededor, lo reconozco… Gracias por recordármelo…
A mi también me encantó el libro de Timothy Ferris, lo recomiendo mucho…
Gracias y un saludo, estaremos en contacto para el proyecto que sabes que tengo en mente…
Ana Sastre dice
Hola Joaquin! Llevas toda la razon escuchar a tu cuerpo puede salvarte en muchas ocasiones y a muchos niveles. Nos vemos pronto por aqui! Un abrazo y que se porten bien contigo los Reyes 🙂
Edwar Apaza Zavala dice
Me gusta muchísimo lo de seguir nuestro plan personal, porque es mejor tener uno malo (que vaya mejorando con el tiempo) a no tener ninguno…
Por otro lado, lo de enseñar para aprender es muy cierto, las cosas que mejor interiorizo son las que mas he ido explicando a otras personas, es un circulo virtuoso porque todos ganan.
Tener un blog es también enseñar, y claro, aprender.
Espero que multipliques por 20 tus cosas aprendidas en tu post sobre el 2015. 🙂